Día de los Inocentes en Irlanda

Día de los Inocentes en Irlanda
¡Cuidado!

En Irlanda, como en muchos otros países, el primer día de abril es el día tradicional de las bromas. Algunos ejemplos clásicos son cambiar los carteles de "Empujar" y "Tirar" de las puertas, cambiar el idioma del teléfono de alguien, colorear la leche con comida, la lista continúa...

La idea es sencilla: engañar a sus amigos con alguna información poco sincera y convertirles en el "Día de los Inocentes". Si tiene fama de crédulo, deberá tener mucho cuidado si quiere sobrevivir a este día sin pasar vergüenza.

¿De dónde procede esta tradición? Sus orígenes no están claros, pero algunos la relacionan con la fiesta romana de Hilaria, celebrada el 25 de marzo. Se trataba de una celebración de la llegada de la primavera y del primer día del año más largo que la noche. Esta fiesta se dedicaba a días de regocijo público e incluía juegos en honor de la madre de los dioses. Durante la fiesta de Hilaria se permitían todo tipo de juegos y diversiones, y las mascaradas eran de las más populares. ¡Divertidísimas sin duda!

Quizá la broma irlandesa más famosa del Día de los Inocentes se realizó en 1965, cuando el periódico The Irish Times publicó un artículo en el que se detallaban los planes del Taoiseach Seán Lemass de prohibir el alcohol e imponer la prohibición en Irlanda. Ni que decir tiene que los lectores estaban más que preocupados hasta que Lemass salió a tranquilizar a todo el mundo y denunció que la publicación no era más que una elaborada broma.

Una tradición irlandesa clásica del 1 de abril consiste en entregar una carta "muy importante" a una víctima desprevenida. Entonces se les pide que entreguen la importante carta a una persona concreta y al leer la carta esta persona manda gravemente a la víctima que la entregue a otra persona. Después de entregar la misma carta a unas cuantas personas diferentes, la víctima suele empezar a sospechar. Cuando ya se han hartado y abren por fin la carta descubren que no contiene más que una frase que dice "No te rías y no sonrías, manda al tonto a otra milla", para su consternación.

En el día de los Inocentes la originalidad es clave, al igual que el arte del engaño. Algunas personas están más dotadas que otras en este terreno, así que si hoy alguien le pide que le haga un recado inusual o le da una noticia especialmente extraña, ¡cuidado que le pueden estar tomando el pelo!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *